Licence to Kill - Malice
Episode 70, Jun 17, 2019, 10:44 PM
Licence to Kill (1987) es el tercer álbum de la banda de metal norteamericana Malice.
Dos años atrás, los norteamericanos Malice habían lanzado un destacado álbum debut que llevaba por título In The Beginning… en el cual se evidenciaba notablemente que la propuesta musical y escénica de la banda no debía pasar inadvertida. Este quinteto procedente de Portland, Oregón (que luego de alcanzar el éxito y firmar con Atlantic Records, prosiguió su camino en Los Angeles, California) practicaba un Heavy Metal contundente, acompañado de uno que otro vestigio hard rockero, con el cual nos aseguraban caña, melodía y headbanging a borbotones.
Dos años atrás, los norteamericanos Malice habían lanzado un destacado álbum debut que llevaba por título In The Beginning… en el cual se evidenciaba notablemente que la propuesta musical y escénica de la banda no debía pasar inadvertida. Este quinteto procedente de Portland, Oregón (que luego de alcanzar el éxito y firmar con Atlantic Records, prosiguió su camino en Los Angeles, California) practicaba un Heavy Metal contundente, acompañado de uno que otro vestigio hard rockero, con el cual nos aseguraban caña, melodía y headbanging a borbotones.
Lo primero a destacar del disco es su sobresaliente, producción, la cual estuvo a cargo Max Norman, quien ha metido mano como ingeniero de sonido en obras clásicas tales como el Blizzard Of Ozz de Ozzy Osbourne, el Rust In Peace de Megadeth, y como productor en otras como el Visual Lies de Lizzy Borden o el Act III de Death Angel, entre otras. Cada uno de los instrumentos se percibe con nitidez y claridad, incluyendo el bajo que sin mayor dificultad surge con su grave sonoridad.
Un dato hay que acotar, es el de que la banda continuamente era comparada con Judas Priest, por lo que eran conocidos como la versión americana de estos. Todo un honor para la banda y una alusión totalmente merecida y envidiable.
Un dato hay que acotar, es el de que la banda continuamente era comparada con Judas Priest, por lo que eran conocidos como la versión americana de estos. Todo un honor para la banda y una alusión totalmente merecida y envidiable.
En comparación a su obra primigenia, el License To Kill no solo es superior en producción sino también por el punto de madurez que la banda logró en ese lapso de 2 años. En donde cada tema tiene esa esencia tan propia que la banda había forjado.